NOCHE DE RUIDOS Y GEMIDOS

 Era la siesta de un verano de enero en que la tierra parece estallar.

como que va a reventar de tanto calor. Los mocosos eran unos maleducados, mal criados por aquellas familias de la ciudad que venían a vacacionar y a mandarse la parte creyéndose superior a nosotros.

Los mocosos decían mira el yuyito mira, claro si en los departamento solo aspiran a  cemento y la retina de sus ojos no conocen otra cosa que pudieran haber visto en algún libro o en la tele.

Josefina Liliana Mariscal del Campo dormía la siesta aquella tarde tirada en su cama desparramando su gordura,emitiendo unos ronquidos espantosos que pusieron alerta a los mocosos, entonces uno de ellos la comenzó a filmar, y no solo los ronquidos, sino enfocaron justo entre medio de las piernas que tenia bien abierta y pudieron ver unas bombachas blancas y unos pelos espantosos que salían por el costado, es que Josefina no se depilaba,  para que, si no quería saber nada con los hombres  y no porque fuera rara sino porque era así y punto. Una sola vez se afeito cuando la operaron y se sentía tan mal por no tener los pelos que ni cuenta se dio de la operación.

Ahora los mocosos salieron corriendo a esconder su travesura, se van al rio para ver el video y reírse

Pero cuando llega la hora de la comida la pobre gorda no se da cuenta que los mocosos se burlan de ella por detrás y comienzan a reírse sin mas no poder, entonces Josefina , la gorda, de ella estamos hablando,y lo digo así en tono despectivo porque es así como ellos la ven, también comienza a reír  tentada por la risa de aquellos desalmados, pobre ingenua no sabe que se burlan de ella.

El padre de Josefina y el de de su prima (la abuela de los mocosos) eran hermanos y habían venido de europa después de una guerra y allí comenzaron hacer plata, después muchos se fueron ,como los 3 hijos varones de la prima de Josefina, que por cierto los crio bien, siendo ella una buena mujer

Pero lo que parece que esta mal son las tres rubias, mujeres de los muchachos, las madres de los mocosos, son unas chetas de la ciudad, teñidas, pintarrajeadas y con algo estético en su haber, alguna nariz, lolas o traste paso por el quirófano. Ellas vienen a relajar a todo el mundo y los mocosos salieron igual que ellas.

Pero hay alguien que comienza a darse cuenta, es Filipito, un peón diríamos, es mas bueno que el pan.

Se dio cuenta que hacían  bromas pesadas a algunas personas, a los animales y otras mas y finalmente vio el video

Filipito se callaba todo como que no entendía, es mas casi que no hablaba, en realidad no habla nada, solo observaba.

Las chetas ordenaban a todo el mundo y se reían por lo bajo, se burlaban de Josefina y de la pobre mucama que limpiaba todo el dia, le tiraban a propósito mugre al piso y ella tenia que limpiar, los mocosos tiraban escupidas y se reían madres e hijos.

Los hombres se fueron de pesca, quedando las mujeres solas, con los mocosos.

Se encontraban en la galería conversando cuando una de ellas dijo, que le parecía una noche rara, demasiado silencio, 

Una de ellas hizo la pregunta fatal. Escucharon hablar alguna vez de la luz mala?

-Y eso que es? pregunto la otra,inmediatamente la tercera dijo, creo que es una leyenda o algo asi, pero dicen que se aparece en las noches y bueno como que son almas que no descansan en paz.

La primera dijo si yo también escuche algo de eso y la segunda pregunto y bueno y eso que tiene que ver con nosotros, es que la noche esta demasiado tranquila dijo la tercera.

Los mocosos estaban escuchando y se acercaron a sus madres muertos de miedo, eran bastantes cobardes, sobre todo en la noche

-Tranquilos dijeron ellas tranquilos

Hubo un silencio letal cuando de pronto escucharon un gemido

-Oyeron eso dijo una de ellas

-Si yo yo....escuche - contesto la otra asombrada

-Es  un gemido - dijo la tercera revoleando los ojos.

-No no!!! ...gritaban los mocosos, y ya no sabían como hacer para hacerlos callar

Los gemidos eran cada vez mas fuertes, se escuchaban pasos, y ruidos de papeles que venían de una de las habitaciones

Donde esta Filipito gritaban todos, claro pobre Filipito era multiuso, también serviría para desenmarañar aquel entuerto

-Sera la luz mala dijo una de ellas

-Pero si no hay ninguna luz

Y claro no había luz alguna ,era noche cerrada. Cuando de pronto escucharon pasos que venían de entre las plantas del jardín...era la mucama,  que sucede pregunto.

Escuchamos ruidos, pasos

Si un gemido - dijo la otra- y ruidos de papeles

-Los papeles, dijo la mucama,  vienen del cuarto de la finada Serafina, acaso no escucharon

-No,no sabemos

-Esos papeles son la herencia que se robaron, nunca apareció y esta estancia esta maldita, porque los anteriores dueños antes de la guerra eran muy felices aquí, y no se sabe como unos europeos se la compraron , pero las escrituras nunca aparecieron.

Los mocosos gritaban cuando escucharon esto y sus madres estaban pálidas como  por desmayarse en cualquier momento.

-Usted dice, que nuestros parientes pudieron haberse quedado con las tierras y no por favor esto pasa siempre, quiero decir, siempre se dicen cosas.

-Si siempre , contesto la mucama mas firme que nunca

-Flipito donde esta, porque es un hombre, y nos puede ayudar.

-Que filipito ? Pregunto la mucama

-El peón , le contestaron

-Aquí no hay ningún peón, 

-Como que no si anda todo el dia por la casa , ensiya los caballos, bueno anda por todos lados - decían las mujeres

-No se de que hablan, bueno tendrán que esperar a que vengan los señores, si es que vienen

-Como si es que vienen, que esta diciendo!!!

-Mira como broma esta bien, pero ya basta- decía otra

-No se si los señores vendrán, porque es noche de ruidos y gemidos - decía la mucama para completarla 

-Mira , nosotros sabemos que nos portamos mal con vos,  pero por favor decinos que esto es una broma tuya. - dijo finalmente la otra porque ya no podía mas

-Entonces que hacemos dijo una

-Tendrán que soportar la noche o irse, por aquel camino que las lleva al pueblo

-Que hacemos dijeron

Finalmente las mujeres y los mocosos emprenderían el camino que las llevaría al pueblo.

Mas tarde cuando regresaron los hombre preguntaron donde estaban sus familias a lo que la mucama respondió

-Se fueron por allí, por el camino que las lleva a la ciénaga, yo las vi.
En la oscuridad Filipito observaba en silencio, la mucama volteo y le sonrió.
El gemido de un pájaro se escucho en la noche.